miércoles, 27 de abril de 2011

UNA EXPLOSIÓN

UNA EXPLOSIÓN ME INVADIÓ




Una explosión me invadió
Una explosión me invadió,
cuando la vida nos cruzó,
sentí en mi cuerpo vida,
sensaciones dormidas,
que florecieron con tu llegada,
llenándome de esperanzas,
de sentimientos compartidos,
de entregas apasionadas.

Una luz brillante penetró,
por mis poros y mi piel,
quedándose para siempre,
como un remanso de placer.

Derechos reservados: Manuel Núñez Amador

UNA LLUVIA DE ESTRELLAS

LLUVIA DE ESTRELLAS




Una lluvia de estrellas,
Ha mojado mis pies,
Y una luz en la tiniebla,
Me hizo resplandecer.

La desidia y la pereza,
Camuflaron mi ser,
Mi pensamiento se volvió,
Torpe y cruel.

La lluvia despertó,
Una ilusión febril,
Por saltar y cambiar,
Mi aspereza senil.

Quiero bailar contigo,
Sin música en el jardín,
Marcando lentos los pasos,
Al compás de nuestro latir.

La guitarra en el rincón,
Los papeles en blanco,
La garganta ronca y rota,
Y las manos con temblor.

Pero una duce canción,
Que escuché por ahí,
Me hizo estremecer,
Que así, no podía seguir.

Fue la lluvia de estrellas,
Con sus notas y sus versos,
Quien salpicaron mi cerebro,
Para de nuevo seguir.

Quiero bailar contigo,
Sin música en el jardín,
Marcando lentos los pasos,
Al compás de nuestro latir.

Manuel Núñez Amador

NO TE ENFADES COMPAÑERA

" NO TE ENFADES COMPAÑERA "





No te enfades compañera,
porque llegué‚ tarde anoche,
que no estuve de juerga,
si eso es lo que piensas.

Estuve con mi amigo,
escuchando sus tristezas,
si le robaron el amor,
una tarde cualquiera.

La miseria de sus penas,
formaron una hoguera,
con llamas grises y rojas,
al crujido de sus quejas.

Que mala suerte la mía,
mil veces se repetía,
con lo orgulloso y contento,
a su lado me sentía ­.

Que mala suerte la mía,
quererte como te quiero,
si ya no podré olvidarte,
pá los restos de mi vida ­.

Si clavaste con paciencia,
lentamente tu mentira,
en lo hondo de mi pecho,
al decir que me quería.

Y una tarde como otra,
cuando a tu encuentro acudía,
en el lecho de tu cuarto,
con otro lo compartías.

Las penas de mi querer,
están regando la tierra,
y en ella sembraré,
la esperanza del olvido.

Que mala suerte la mía,
mil veces se repetía,
con lo orgulloso y contento,
a su lado me sentía ­.

Que mala suerte la mía,
quererte como te quiero,
si ya no podré olvidarte,
pá los restos de mi vida ­.


Derechos de autor: Manuel Núñez Amador

NO TE ENFADES COMPAÑERA

" NO TE ENFADES COMPAÑERA "





No te enfades compañera,
porque llegué‚ tarde anoche,
que no estuve de juerga,
si eso es lo que piensas.

Estuve con mi amigo,
escuchando sus tristezas,
si le robaron el amor,
una tarde cualquiera.

La miseria de sus penas,
formaron una hoguera,
con llamas grises y rojas,
al crujido de sus quejas.

Que mala suerte la mía,
mil veces se repetía,
con lo orgulloso y contento,
a su lado me sentía ­.

Que mala suerte la mía,
quererte como te quiero,
si ya no podré olvidarte,
pá los restos de mi vida ­.

Si clavaste con paciencia,
lentamente tu mentira,
en lo hondo de mi pecho,
al decir que me quería.

Y una tarde como otra,
cuando a tu encuentro acudía,
en el lecho de tu cuarto,
con otro lo compartías.

Las penas de mi querer,
están regando la tierra,
y en ella sembraré,
la esperanza del olvido.

Que mala suerte la mía,
mil veces se repetía,
con lo orgulloso y contento,
a su lado me sentía ­.

Que mala suerte la mía,
quererte como te quiero,
si ya no podré olvidarte,
pá los restos de mi vida ­.


Derechos de autor: Manuel Núñez Amador

NUNCA PODRÉ OLVIDAR

NUNCA PODRÉ OLVIDAR






Nunca podré olvidar
Aquel amanecer
Donde tu y yo
Cantamos al amor


Era la primera vez
Para los dos
Y un volcán nació
Con el amor

La lluvia tras el cristal
De aquella habitación
Tus besos y tu olor
Y toda la emoción.

Era la primera vez
Para los dos
Y un volcán nació
Con el amor

Derechos autor: Manuel Núñez Amador

domingo, 17 de abril de 2011

ANA



ANA





Ana:
Cuando se cierra una puerta,
Con ella una vida se va,
si la dejamos abierta,
Nos invitará a soñar.

Ana:
Toda mi vida vagabunda,
Sin lugar ni fronteras,
Me hizo abrir los ojos,
Y creer que con amor,
La vida resulta mejor.

Ana:
Cuantas impurezas,
Hay en la vida,
No persigas nunca la duda,
Busca siempre la verdad,
Y con ella el amor, amor,
Como el que te quiero dar.

Ana:
Cuando los pueblos,
Se liberen del hacha de guerra,
Cuando podamos vivir,
Sin idiomas ni fronteras,
Como nuestros padres
De la antigua era,
Sí, como Adán y Eva.
Nos amaremos en libertad.

Ana cierra los ojos,
Entrégame tu amor,
Juega limpia y sin temor,
Que en mí encontrarás,
El calor que necesitas.

Ana: dame más amor.
Ana: toma mi amor.

Manuel Núñez Amador

YO ERA COMO EL AIRE

" Yo era como el aire "







Yo era como el aire,
que su fuerza perdió,
porque un día el destino,
de ti me alejó.
El agua sin motivos,
puso metros y sol,
porque le dijeron,
hazlo sin temor.

Yo sé bien,
porqué fue,
tu marchar,
mis palabras,
perdieron su valor,
la sonrisa,
que tenías para mí,
se marchitó.

Y ahora así tan lejos,
el tiempo lo dirá,
si esto es verdadero,
no morirá.
Espero que lo pienses,
que afrontes la verdad,
que aunque te hayas ido,
no morirá.

Autor: Manuel Núñez Amador.

viernes, 15 de abril de 2011

UN FANTASMA ENAMORADO

UN FANTASMA ENAMORADO





Erase una vez un fantasma enamorado, que a la luz de su magia revoloteaba. Quiso el destino que el amor a su alma llegara. Fueron días de fantasías y de magia, al comprobar la soledad de su dama. Sin verle, sin tocarle, ella presentía un hado de misterio que le encantaba, sus días se tornaron alegres y nació en ella la esperanza. Su vida se tornó de energía, de dinamismo y de ilusiones. Al tiempo, su realidad práctica, descubrió que ya estaba harta de soñar, que la vida hay que vivirla intensamente cada segundo y dejar atrás los mundos de la magia.
Pronto, el fantasma, comprobó su error, pues ella estaba enamorada. Y su luz se apagó, vagando por los rincones, buscando el calor que el aire se llevaba.
Viéndola bailar, con el corazón emocionada, suspiraba y lloraba, contemplándola tan hermosa y galana. Al mismo tiempo se alegraba de verla tan feliz, pues él no era futuro ni esperanza; y cambió su amor para servirla en su caminada.
Allí muy cerca de ella, su príncipe azul le esperaba, para llenarle de ilusiones, de realidades y de amor y ella explotó comprobando que sus dichas por fin se alcanzaban.
Adiós amores lejanos, adiós amores soñados, adiós amores imposibles, que ha llegado por fin la primavera a mi corazón. En su felicidad cantaba y gritaba, para que de su vida los viejos fantasmas se alejaran.
Mas el triste fantasma, pudo ocultarse entre las cortinas, siguiéndola por los pasillos y guardando su espalda. Pero el destino, a veces, es injusto y cruel. Ella se sentía observada, comprendiendo que un espíritu le acechaba y contrató a una hechicera para que lo alejara de sus presencias. Aquella daga negra, de la hechicera mágica, encontró donde el fantasma se alojaba. Y gritó en alta voz:
- “¿Quién se esconde detrás de las cortinas?, ¿qué es lo que busca?, ¿por qué de tú presencia en esta casa? ¡Le ruego que hables si no quieres probar las esencias de mi daga, que te enviará a los lugares más negros y dolorosos de los confines de la tierra! ¡No deje que utilice mis fuerzas, te contaré 3 y habla!
- Soy, soy, soy, el alma de un fantasma, que un día entré por la ventana y me enamoré de una dama. Desde ese momento, me enclaustré en esta casa, para llenarme de su amor, a pesar de lo imposible que de mí se enamorara. Nada malo hice, nada malo quiero para ella. Me limitó a descorrer las cortinas para que los rayos del sol y la luna doren su cara. Apartando los malos espíritus que le acechan para atacarla, dando mi alma para que nada le dañara. Me alimento de su perfume, de sus pasos suaves y de su mirada en el espejo cada mañana.
- ¡Pero qué estás diciendo, malvado espíritu infernal!, te doy una oportunidad para que abandones la casa.
- No podré hacerlo, aunque mi alma la condenaras, ya no puedo vivir sin su presencia, ¡déjame que la custodie!, seré su ángel de la guarda.
- ¡Maldito insolente fantasma!, una oportunidad te doy para que salgas por esa ventana y nunca más vuelva o sabrás de mi daga.
- ¡Qué me importa el dolor, qué me importa mi alma, si ya no podré vivir lejos de esta casa!
- Tú lo has querido, aquí está la prueba y la fuerza de mi venganza.
La hechicera, mojó su daba en un brebaje y se abalanzó sobre las cortinas. Un grito de dolor, retumbó en la estancia, unas gotas de sangre llenaron el cortinaje, que resbalaron hasta alcanzar el suelo. Un olor de azahar inundó la sala, un olor que para siempre impregnaría la casa. Un humo celeste y blanco, salió por la ventana y nunca más se supo del fantasma.

Derechos reservados: Manuel Núñez Amador

SE ME DERRITEN LOS LABIOS

SE ME DERRITEN LOS LABIOS





Tengo un amor imposible,
Que cuando pienso en sus besos,
Se me derriten los labios,
Y mis ojos terminan llorando.

Es un amor de ensueño,
Que me habla y sonríe despierto,
Mas cuando la noche se acerca,
Me retiro a mi aposento sediento.

Aun siendo imposible lo nuestro,
Es un amor profundo y tierno,
Diferentes caminos tomaremos,
Hasta que hablen los tiempos.

Mi alma se vestirá de fantasía,
Merodeando tus sentimientos,
Me verás por la ventana volando,
Como una paloma sin aliento.

Quizá en otros momentos,
Donde no existan paisajes ni tiempos,
Podamos encontrarnos libres,
Y convirtiendo en posible, nuestro sueño.

Derechos Reservados: Manuel Núñez Amador

NADIE


NADIE





Agarrado a tu cuerpo,
Como el niño a su madre,
Con todo su cariño,
Y todo su linaje.
Nadie me quitará,
Esta idea de amarte,
Nadie.
Agarrado a esta idea,
Con ardor y coraje,
De seguir a tu vera,
Por más que me aparten.
Nadie me quitará,
Esta idea de amarte,
Nadie.

Así vivo por ti,
Mientras amor me quede,
Así vivo por ti,
Aunque la muerte me llegue.
Si tú eres para mí,
El sol de mi vida,
La luna y las estrellas,
Y el sendero de mis días.

Como flores abiertas,
En día de primavera,
Con murmullos contarios,
De abejas visitantes.
Nadie me quitará,
Esta idea de amarte,
Nadie.
Aunque parezca mentira,
Nadie es de nadie,
Pero por más que lo pienso,
Yo soy de tu aire.
Nadie me quitará,
Esta idea de amarte,
Nadie.

Manuel Núñez Amador

EL VIVIR NO CONSISTE

EL VIVIR NO CONSISTE





El vivir no consiste,
cerrar los ojos y soñar,
abrir la boca y bostezar,
es necesario caminar.
Y tomando las manos
De vagabundos y obreros,
de sedientos y oprimidos,
para, construir caminos.
anchos y serenos,
que no coarten el respirar,
tampoco la fe de volar,
sólo vivir, para ayudar.
Dejando los reproches,
palabras tontas sin colores,
que la luz brille en las noches,
envueltas por hermosas flores.
Nunca dejes anclado,
a pesar del resultado,
a tu más fiero enemigo,
Ve, y estréchale tus manos.
Porque para vivir,
Todos somos necesarios,
Desde el albañil al aprendiz,
Del agua a los pájaros.
De qué me sirve estar,
Conmigo sólo asociado,
Sí veo a mi alrededor,
Hombres sufriendo y anclados.

Derechos reservados: Manuel Núñez Amador

EN LA MADRUGADA

" EN LA MADRUGADA "




En la madrugada,
a sola con mi pensamiento,
oigo cantar los grillos,
canciones de amor.
En sus notas se deslumbran,
pasiones ocultas,
tristezas desesperadas,
adioses sin llegadas.

¿Y dónde estás tú,
tal vez dormida,
con sueños intranquilos,
o respirando feliz?.
¿Y dónde estás tú,
tal vez ya no te acuerdes,
de aquellos momentos,
que pasaste junto a mí?

Recuerdo la espuma,
que cubría tu cuerpo,
el olor de las flores,
y tus palabras al viento.
El amanecer templado,
con sus cálidos colores,
y de vez en cuando,
el canto de un pájaro.
Mañana cuando me levante,
no recordaré nada,
la situación del momento,
cambiará mi pensamiento.
La lucha cotidiana,
el café‚ de corriendo,
el cansancio del trabajo,
y por último el sueño sediento.

¿Y dónde estás tú,
tal vez dormida,
con sueños intranquilos,
o respirando feliz?.
¿Y dónde estás tú,
tal vez ya no te acuerdes,
de aquellos momentos,
que pasaste junto a mí?


Manuel Núñez Amador

LUNITA BLANCA VELERA

" LUNA BLANCA VELERA "





El niño está mirando,
como se mueve la luna,
entre algodones blancos,
blancos como la espuma.

La sigue por la ventana,
sus manos quieren cogerla,
pero una nube negra,
la esconde para ella.

Que rabia tengo luna,
lunita blanca velera,
¿por qué‚ te la llevas nubes?
¿ por qué‚ no me dejas verla?

El niño se está durmiendo,
con lágrimas inquietas,
esperando que la noche,
le traiga su presencia.

No le asusta que le digan,
que la luna no es buena,
por ser amiga del lobo,
y de pesadillas negras.

Que rabia tengo luna,
lunita blanca velera,
¿por qué‚ te la llevas nubes?
¿ por qué‚ no me dejas verla?

Lunita blanca velera,
reposa en mi cabeza,
que tu luz me ilumine,
en las oscuras veredas.

Que tu brillo me proteja,
del miedo y la miseria,
para que la nube negra,
no asome su tinieblas.


Que rabia tengo luna,
lunita blanca velera,
¿por qué‚ te la llevas nubes?
¿ por qué‚ no me dejas verla?



Derechos reservados: Manuel Núñez Amador

DESNÚDATE DESPACIO

" DESNÚDATE DESPACIO "




Desnúdate despacio,
que quiero traspasar,
con mi mirada ansiosa,
los contornos de tu piel.

En tus ojos me detengo,
y la oscuridad de ellos,
se convierten en un mar,
profundo y sereno.

De tus ojos a la boca,
como fresa en miel,
apoyada en tus dientes,
que embellecen tu tez.

En tus hombros descanso,
mi cabeza cansada,
y encuentro la paz,
apacible y deseada.

Las aureolas de tus senos,
anuncian con esbeltez,
montañas elevadas,
pero llenas de sencillez.

Tus muslos anchos y fuertes,
descubren la pesadez,
que la procreación humana,
te exige como mujer.

Tus manos y tus dedos,
muestran rigidez,
pero llenos de ternura,
como la piel de un bebé‚.

En resumen, tu cuerpo,
es un profundo vergel,
de arboledas florecidas,
que nunca olvidaré.

Cuando la ausencia,
nos separe otra vez,
cerraré los ojos,
y entonces.... lo recordaré.

Derechos de autor: Manuel Núñez Amador

ABRE LA PUERTA MUJER

“ ABRE LA PUERTA MUJER “





Abre la puerta mujer,
Para que entre la brisa del mar.
Abre la puerta mujer,
Que el aire te lleva aroma de amor.

Abre la puerta mujer,
Mira al cielo con su resplandor.
Abre la puerta mujer,
Que las estrellas brillan de ilusión.

Cuando te vaya mujer,
No cierre la llave de tu corazón,
Y si la duda te muestra dolor,
No tengas pudor en llamarme amor.

No, no te vayas,
No, no de mi agua.

Abre la puerta mujer,
Para que entre la brisa del mar.
Abre la puerta mujer,
Que el aire te lleva aroma de amor.

Mi agua está limpia mujer,
Bebe y comprueba que no es pasión,
Si sale con fuerza y con calor,
De los torrentes termales de mi corazón.

No, no te vayas,
No, no de mi agua.



Autor : Manuel Núñez Amador

LA VI PASAR UNA MAÑANA

" LA VI PASAR UNA MAÑANA "





La vi pasar una mañana,
contenta y feliz,
llevaba un traje blanco,
blanco como la mañana.

Con el pelo suelto,
que le tapaba la cara,
y una sonrisa en su boca,
que yo imaginaba.

La seguí con el pensamiento,
en su caminar sereno,
y en una esquina se perdió,
pero no mis sentimientos.

No sabes cómo te siento,
cómo vivo esos momentos,
si cada paso que das,
martillean mis adentro.

Qué mala suerte la mía,
la de amar en silencio,
verte pasar día tras día,
y tú sin saberlo.

El tiempo pasó,
y nada cambió,
sólo pude disfrutar,
de tu amor en silencio.

Autor: Manuel Núñez Amador

ASÍ SERÁ TU VIDA

" ASI SERA TU VIDA "




El cansancio de andar,
de un lado a otro corriendo,
buscando ideas soñadas,
para no encontrar nada.
La pereza se apodera,
de tu mente y tu alma,
y ves pasar las cosas,
sin importarte nada.
Te apasionas en tareas,
que realizas con desgana,
dejando para otros momentos,
inquietudes apasionadas.

Así será tu vida,
si no la pones clara,
centrado tus ideas,
en textos y programas.

La lucha cotidiana,
tómala con paciencia,
que te arrastra en su lodo,
sí vas con insistencias.
Llegado el momento,
analizas tus sapiencias,
de tus sueños de joven,
ahora dime ¿que quedan?
Que la renuncia a ellos,
enquistaron tu conciencia,
reprocharte para qué‚,
no castigues tu existencia.

Que los años pasaron,
y dejaron sus huellas,
espinas y sin sabores,
y rara vez estrellas.

Que alumbraran tus pasos,
por sendas serenas,
sin obstáculos negros,
sin zancadillas puestas.
Ahora con tus recuerdos,
a solas en tu cuarto,
toma papel y lápiz,
y dibujas siluetas.
Corazones rosados,
películas bellas,
gozas unos instantes,
darles riendas sueltas.
Porque detrás de ellos,
se abrirá la puerta,
mostrándote entero,
las miserias de afuera.

Libérate un instante,
golpea si es preciso,
pon los puntos en la mesa,
y retoma las riendas.


Derechos reservados: Manuel Núñez Amador

domingo, 10 de abril de 2011

NADIE

NADIE




Agarrado a tu cuerpo,
Como el niño a su madre,
Con todo su cariño,
Y todo su linaje.
Nadie me quitará,
Esta idea de amarte,
Nadie.
Agarrado a esta idea,
Con ardor y coraje,
De seguir a tu vera,
Por más que me aparten.
Nadie me quitará,
Esta idea de amarte,
Nadie.

Así vivo por ti,
Mientras amor me quede,
Así vivo por ti,
Aunque la muerte me llegue.
Si tú eres para mí,
El sol de mi vida,
La luna y las estrellas,
Y el sendero de mis días.

Como flores abiertas,
En día de primavera,
Con murmullos contarios,
De abejas visitantes.
Nadie me quitará,
Esta idea de amarte,
Nadie.
Aunque parezca mentira,
Nadie es de nadie,
Pero por más que lo pienso,
Yo soy de tu aire.
Nadie me quitará,
Esta idea de amarte,
Nadie.

Manuel Núñez Amador